El grupo de profesionales y comunicadores, aseguran que están educando para la paz, para que exista convivencia armónica, pero no podemos lograr ese objetivo “jugando a la guerra y promoviendo la violencia con esta clase de juegos”.
Sicólogos y expertos en temas de la niñez sugieren a los adultos no fomentar prácticas violentas, pues consideran que bastante tienen los niños dominicanos con el ambiente de inseguridad que se vive en el país y al obsequiar los juguetes bélicos contribuyen a que los niños creen fantasías con la violencia.
Resaltan que en suplementos y revistas, los comerciantes hacen buena publicidad para que los padres compren a sus hijos juguetes que incitan a la violencia, como pistolas, rifles, así como cuchillos, navajas y cerbatanas reales, y hasta ballestas.
Según la Dra. Nélida Molina, reconocida sicóloga asegura que al regalar juguetes bélicos se inculcan “ideas violentas, aunque los menores no estén pensando en matar a nadie, la imaginación lo lleva a tomar acciones y actitudes donde la violencia se verá como algo normal”.
Debido al avance de la tecnología en estos tiempos, eso hace que muchos niños y jóvenes prefieran los videojuegos, sin embargo estos tienen alto contenido de violencia y sadismo.
La sicóloga Molina comentó que “no es conveniente regalar videojuegos violentos a los niños porque crean adicción, además alteran su nivel neurológico”, y agregó que es una actitud irresponsable de los padres “dar estos regalos con el fin de mantener entretenidos a nuestros hijos para que no molesten ni hagan travesuras”.
Los organizadores de la campaña exhortaron a las personas a que este año, en fecha en que se celebrará el Día de Reyes, regalen a los niños y niñas juguetes que promuevan una Cultura de la Solidaridad e ignoren aquellos artefactos y juegos que incitan a la violencia.
Para el Ing. Franklin Torres, coordinador general de la campaña, indicó que la violencia que observamos en los seres humanos de la sociedad de hoy no es natural, pues, es aprendida y promovida por las diversas instituciones sociales.
Señaló que una de las formas en que los niños y niñas aprenden la violencia es a través de los juguetes que les regalan y los juegos que les enseñan.
“A través de los juguetes y juegos violentos, se promueve la naturalización de la violencia, ya que desde temprana edad se socializa en el relacionamiento a partir de la violencia. Los niños y las niñas aprenden, de esta manera, a ver la violencia como un entretenimiento, una diversión y un juego”, expresó.
Los comunicadores plantearon que los juguetes y los juegos de los niños y las niñas son una muestra de los valores de una sociedad y que en esta Cultura de la Dominación predominan los juegos relacionados con la guerra, las armas, la competencia.
“Tenemos la oportunidad de aportar a una sociedad sin violencia en todas las acciones que realizamos. Para este Día de Reyes podemos aportar a una Cultura de paz y solidaridad, regalando juguetes y enseñando juegos que promuevan la cooperación, el amor, el cuidado y el cariño”, apuntó la sicóloga Molina, quien experta en violencia intrafamiliar.
Molina consideró que la violencia no es un juego, por lo que hay que enseñar a los niños y las niñas a que se pueden divertir y reír sin necesidad de ser violentos ni de simular la violencia. Agregó que los juegos y los juguetes también pueden ser una forma de ir educando hacia la sociedad de amor y solidaridad que queremos y debemos construir.
A la campaña se han sumado importantes sectores de la comunicación entre los que destacamos la Asociación de Productores de Televisión y Radio de la Provincia Espaillat, La Asociación de Camarografos, La Asociación de Artistas Plásticos de Moca, La Asociación de Artistas Plásticos de San Victor, La Asociación de Artistas y Cantantes Mocanos, Directores de paginas webs, Productores Independientes, así como la Presidenta de Juntas de Vecinos de la Provincia Espaillat.
EDUCACIÓN :: Transmisión de valores a través de los juguetes
Cuando nuestros hijos juegan con un juguete, cualquiera que éste sea, no sólo están divirtiéndose, sino que también están aprendiendo algo. Es por ello que deben tomarse en cuenta varios criterios a la hora de seleccionarlos. Pero hay uno que es importante y que es tomado en cuenta poco, al menos conscientemente por los padres, y es la transmisión de los valores a través de los juguetes.
Niño compartiendo sus pinturas
Esto influye enormemente sobre los pequeños y cada familia lleva una pauta en el mismo. Por ejemplo, las hay quienes prefieren evitar los juguetes bélicos, porque consideran que fomentan la violencia. O hay otras que no compran juguetes que dan miedo para no causar temor en los niños. O los padres que antes de comprar un juguete, verifican que el mismo no dañe el medio ambiente. Todo ello es aprendido por el niño desde pequeño.
Si bien existen parámetros que influyen positivamente sobre el niño y le inculcan el rechazo a la violencia o el respeto al medio ambiente, los hay también aquellos que pueden generar una actitud egoísta en el niño, como la compra de juguetes que incitan a la individualidad o que fomentan la ganas de sobresalir o que son demasiado sofisticados y pueden provocar la envidia en otros niños de su edad.
El consumismo de hoy
La mayoría de niños, hoy en día, son víctima de las agresivas campañas de TV y sienten la necesidad de ir a determinada tienda o juguetería y adquirir tal o cual juguete por el mero hecho de tenerlo y ya no por necesidad.
Si ya tienen una muñeca de determinada marca, la querrán en su nueva versión, si ya tienen una bicicleta, querrán el modelo de montaña y así… lo peor del caso es que debido a la moda, una vez cumplido el capricho, se olvidan rápidamente del juguete y terminan por abandonarlo.
En estos casos, lo mejor es educarlos desde pequeños, enseñarles a ser realistas y selectivos en la elección del regalo ideal y no dejarse llevar por los amigos o los medios de comunicación. En ese sentido, los padres deben ser firmes y aconsejar al menor con cariño y paciencia.
Enseñarles además que no pueden tener todos los juguetes que desean y que deben establecer prioridades, aprender a establecer las ventajas y desventajas de cada objeto.
Por ejemplo, al escribir la carta a los Reyes Magos en Navidad, recalcarles que sólo pueden pedir 1 ó 2 juguetes, que escojan cuál les gustaría más. Y al momento de hacer la compra, elegir los juguetes que le vayan a ser útiles, seguros y divertidos.
Los juguetes y su valor cultural
Cada sociedad tiene sus paradigmas y esto influye en el entorno del niño. Así, un niño de principios del siglo XX recibía un arco y una flecha en África, mientras uno de Europa pequeños trenes a vapor. En la actualidad, mientras un niño del campo juega probablemente al aire libre con una pelota de trapo, un niño de una gran urbe juega con su mini portátil. Esto sólo refleja que los juguetes se adaptan a los tiempos que vivimos.
Esta realidad la vemos también en las muñecas, que de lindos bebés, han pasado a ser profesionales que trabajan fuera de casa, lo que refleja la cada vez mayor autonomía de la mujer. Esto ha aumentado la gama de juguetes que los niños tienen para elegir, aunque la premisa de que los mismos representen una parte de la vida misma continúa vigente.
Los juguetes sin duda se han modernizado mucho, pero no por ello debemos dejar de lado a los tradicionales, tales como la pelota, la cuerda para saltar y las canicas. Es importante incentivar el uso de los mismos en los pequeños a pesar de la creciente tecnología que nos invade, pues además de estrechar la relación con los padres, promueve el trabajo en equipo, la inteligencia y la definición de estrategias.
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