La situación pondrá en una lucha cuerpo a cuerpo a Mejía, ex presidente de la República, contra Miguel Vargas Maldonado, ex candidato presidencial de los comicios del 2008, quienes luego de pactar con diferentes corrientes han quedado como las dos figuras principales de la organización.
Para el politólogo Freddy Ángel Castro, director de la escuela de ciencias políticas de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), las alianzas entre los precandidatos del PRD permiten una articulación de las fuerzas en dos polos, así como la eliminación de varios de los postulantes.
En el caso de Vargas Maldonado, arribó a acuerdos políticos para apoyar su proyecto presidencial con Eligio Jáquez, Aníbal García Duvergé y Máximo Castillo Salas, mientras Mejía lo hará con Luis Abinader y Guido Gómez Mazara.
"Con el entendimiento respecto a la organización de la convención, y la conformación de una comisión organizadora más o menos de consenso, no deberían presentarse problemas en la organización del proceso y los resultados, lo que mejorará la posición del PRD ante la opinión pública y de las fuerzas internas del partido", vaticinó Castro.
Indicó que si bien una alianza entre Mejía y Abinader será beneficiosa para el primero, le restaría oportunidades de crecimiento y proyección al segundo.
"Abinader acaba de cometer un error estratégico, porque debió continuar con su proyecto y su posicionamiento a lo interno del partido, y si quería llegar a un acuerdo, hacerlo en los días próximos de la convención, ya que había recorrido todo un accionar político de su propuesta, diferenciándose de Hipólito y Miguel", enfatizó.
Para mañana a las 10:00 a.m., Mejía y Abinader firmarán un acuerdo político para ir aliados a la convención interna del PRD, pautada para el 6 de marzo del próximo año. El acto se llevará a cabo en el salón Ámbar del hotel Dominican Fiesta.
Gómez Mazara también lo hará con Mejía a principios de año.
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