Publicada en la revista Social Psychology Quarterly, el especialista sostiene que la fidelidad tiene una relación directa con el intelecto o inteligencia, pero inversamente proporcional para los hombres infieles. Es decir, de entre los casos estudiados, entre más tendientes a engañar, menor coeficiente.
En ese sentido, explica que los hombres más listos tienen menos aventuras y dan más importancia a las relaciones estables, en comparación con aquellos que poseen un coeficiente intelectual bajo.
"Los hombres inteligentes son más propensos a valorar la exclusividad sexual", afirma Kanazawa, quien además determinó con su estudio que los hombres que engañan a sus esposas o novias en efecto tienen menor coeficiente.
Su estudio no sólo se centra en la fidelidad, sino que abarca de manera amplia al coeficiente intelectual y cómo está relacionado e influenciado por conceptos y actitudes cotidianas, como la religión, relaciones de pareja o ideas políticas.
Al respecto, el especialista aclara que los hombres que se identifican como liberales, ateos, fieles y poseen mayor inteligencia que los hombres infieles, quienes además se definen como creyentes y conservadores.
Con lo anterior, Kanazawa afirma que las personas que daban importancia a la fidelidad sexual en una relación tenían coeficiente más alto, por lo que el comportamiento "fiel" del hombre más inteligente, en realidad podría ser una señal de la evolución de la especie.
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