Adelgazar rápido es definitivamente una gran motivación y, por lo tanto, muy recomendable, pero hay un método correcto y otro equivocado.
Si la pérdida de peso está asociada a disminución en la medida de la cintura (al cerrar el pantalón), significa que el proceso de adelgazamiento está funcionando correctamente, disminuyendo la grasa.
Bajar de peso bien vs bajar de peso mal
Al hacer dieta, de inicio se logra bajar de peso, aunque no se queme mucha grasa. Con solo seis horas de ayuno, el azúcar en la sangre empieza a subir (aún sin haber comido); es la destrucción muscular, que evita quedarnos sin energía.
Si dejas de comer las proteínas necesarias, el cuerpo recurre a “auto-devorar” los músculos. Al perder músculos se baja de peso, pero no tanto de medidas.
En cambio, disminuir de medidas evidencia la reducción de grasa. Además, el metabolismo se afecta al perder los músculos que funcionan como los “hornos” donde se queman los alimentos.
¿Qué ocurre cuando la dieta continúa varios días?
La hormona leptina baja y la ghrelina sube, lo que ocasiona que la sensación de hambre sea cada vez más intensa. A partir de este momento, la ansiedad aparece y ningún medicamento puede disminuir el apetito.
Consecuencias de hacer dietas
Metabolismo lento: Cada vez es más difícil encontrar músculos disponibles para quemar los alimentos. En este momento, aun comiendo poco, ya no se logra seguir bajando de peso y el efecto rebote es inminente.
Cuando la leptina se encuentra baja y la ghrelina alta, cualquier alimento dulce produce un placer tan intenso que el riesgo de volverse adicto a los carbohidratos es realmente peligroso.
¿Cómo reconocer si estoy perdiendo grasa o músculo?
Al empezar un estilo de vida sano con suficientes proteínas, el proceso de adelgazamiento ocurre aún más rápido que con una dieta hipocalórica, pero la principal diferencia es que en vez de perder los músculos es la grasa la que se está disminuyendo
¿Qué puede inhibir que logres bajar de peso rápidamente?
1. Tomar medicamentos que engordan.
2. Estar sufriendo el efecto rebote de la dieta anterior.
3. No dormir suficiente.
4. Hacer ejercicios en ayunas.
5. Comer exceso de carbohidratos sin saberlo (ejemplo: frutas en la cena).
6. Comer solo dos veces al día.
La mayoría de las personas con sobrepeso sufren de “cerebro de gordo”; esto es, despiertan sin hambre y no desayunan suficiente, pero en la tarde sienten incontrolables ataques de ansiedad.
Por ello, es importante llevar un estilo de vida sano porque te permite bajar de peso rápido y para siempre, así como disminuir los ataques de ansiedad.
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