De acuerdo con información de excelsior.com.mx, la psicóloga-terapeuta sexual y autora de Los misterios del amor y el sexo, Silvia Olmedo, existen muchas razones por las que la gente es infiel; señala que la infidelidad no se presenta durante la fase de enamoramiento, sino en la de apego.
“Algunos quieren llenar un hueco que tienen con su pareja, otros satisfacer un impulso, y otros tienen necesidad de afecto, aventura o desean romper la rutina”, afirmó Olmedo.
Por otra parte, Juan Abelardo Hernández, doctor en psicología, asegura que no todas la infidelidades son iguales y que hay un tipo de infidelidad no planeada, que puede ser un encuentro ocasional o circunstancial.
“La persona infiel no está pensando en alguien en especial, más bien se deja llevar por las circunstancias de un momento o por contingencias externas. En el caso de los hombres, por ejemplo, cuando salen de fiesta y consumen alcohol puede que se involucren con alguien a quien no vuelven a ver”, detalla.
Sin embargo, explica que la infidelidad más peligrosa es la que poco a poco comienza a desplazar a la relación que se tiene con la pareja formal: “No es una regla, pero los amasiatos se originan en empleos que requieren que los trabajadores pasen más tiempo en la oficina que lo acostumbrado. Por lo regular se da entre jefe y subordinado”.
Finalmente, Gabriela Flores, psicoanalista de la UNAM, indica que la magia de “los amantes” se termina cuando la costumbre irrumpe en la aventura.
En este sentido, de acuerdo con el Instituto de Investigación Psicología Clínica y Social (IIPCS), sólo diez por ciento de las personas que se separan de su pareja, tras una infidelidad, se casan con sus amantes. “Cuando la amante se convierte en la nueva pareja deja el rol que le daba ese toque de adrenalina y diversión: el ciclo se repite”, considera la especialista.
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