Ha pasado el tiempo y sigues en contacto con esa persona que conociste aquella noche; de vez en cuando salen y es más que obvio que cada vez que se ven, tu cuerpo genera sensaciones extrañas; ya que por más que no quieras aceptarlo, ese él o ella te gusta, pero no quieres que lo note.
Esta situación es conocida comúnmente como tensión sexual, que como dice lular.es, es cuando una o las dos personas se sienten atraídas por el otro, pero no pueden o no quieren hacer algo más ante esa atracción.
La tensión sexual está regulada por la testosterona y otros aspectos cerebrales-cognitivos y ambientales que sólo hacen que se sienta el deseo irrefrenable de consumar dicha atracción.
¿Cómo saber si estamos viviendo un episodio de tensión sexual? El sitio quo.es enlistó una serie de aspectos físicos que nos dicen claramente que estamos viviendo uno de esas situaciones que conforme pasan los minutos, se vuelven incómodas. Algunos de los síntomas son:
1. Sentir que el corazón late más rápido, que te cuesta respirar y enrojecimiento del rostro.
2. Sensaciones de cosquilleo en el estómago, debido a que aumenta el flujo sanguíneo, lo que hace que se contraigan las venas abdominales.
3. En la mujer, los pezones se ponen duros y la vagina comienza a lubricar de más.
4. En los hombres, hay mayor sensibilidad en los testículos y pueden presentar erección.
5. Todos los sentidos se hipersensibilizan y la tensión aumenta cuando es estimulada por medio de alguno de ellos.
6. Hay dilatación de pupilas, fenómeno que atrae aún más a la persona que se encuentre frente a ti.
7. El cerebro activa el sistema límbico, encargado de regular las sensaciones que genera el placer y el dolor.
Los especialistas señalan que la tensión sexual es muy sana en cualquier relación, siempre y cuando se dé en los momentos correctos. Nadie puede negar que sentir mariposas en el estómago es un momento agradable.
Pero si la tensión se prolonga por varios meses y sin que pueda resolverse, los hombres podrían experimentar erecciones y eyaculaciones mientras duermen y las mujeres llegan a presentar trastornos en su ciclo menstrual, ya que hay una alteración en el sistema hormonal, afirma down21.org.
Pero no siempre la tensión sexual tiene un concepto negativo; un estudio realizado por la Universidad Stony Brook de Nueva York encontró que, contrario a otras teorías que afirman que el enamoramiento y la pasión entre una pareja dura escasos tres años, con ayuda de una tensión sexual bien dirigida puede hacer que una relación permanezca estable y sana por casi dos décadas.
Aún así, hay quienes prefieren terminar lo más pronto posible con este juego de seducción... Así que, ¿cómo frenar y terminar con la tensión sexual que parece no llevar a nada? Aquí tienes unos tips que seguro te serán de gran utilidad:
1. La tensión sexual puede resolverse para bien, lo cual significa que la pareja por fin han dado un paso hacia delante e iniciarán una relación. Por lo regular la sensación es de satisfacción, siempre y cuando no se presenten situaciones de desilusión.
2. Puede terminar mal y es que alguno de los dos puede terminar aburriéndose de ese juego que parece no llevar a nada, una situación que seguramente hará sufrir al otro que no se percató del detalle.
3. Hay quienes deciden seguir con la tensión, porque dicen sentirse cómodos. Lo que no saben es con el tiempo, la situación se vuelve un problema, ya que lo único que construirán será una relación adictiva.
4. Dile no a situaciones comprometidas. Si hay algo que comienza a no gustarte del rol, personalidad o juegos que la otra persona comienza a develar, dale la vuelta, pues podrías entrar a un círculo vicioso que pudiera generarte mucho daño.
5. Haz lo que realmente te nace hacer y sobretodo que te haga sentir bien. No vayas por la vida fingiendo algo que no eres.
6. Si has decidido entrarle al juego, llega hasta donde tú quieras y si las cosas no son o no salen como lo habías planeado, dale vuelta a la hoja, olvídate de todo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario